Semana 3 del embarazo: ¡tu bebé viene en camino!

¿Estás lista para este mágico momento? ¡Felicidades! Estás oficialmente embarazada. Aquí te contamos más sobre lo que está sucediendo en tu cuerpo en estos momentos, y qué nutrientes pueden apoyar tu salud desde esta etapa.

Primero que nada, hay que tener en cuenta que el embarazo se calcula basándote en el primer día que tuviste tu última regla. La primera semana corresponde a tu ciclo menstrual, mientras que en la segunda tus ovarios liberan un óvulo, que será fertilizado por el esperma de tu pareja durante la tercera semana¹.  La tercera semana equivale a 21 días; es decir, aún estás en el inicio de tu primer trimestre.
Aunque aún no sientas muchos cambios en tu cuerpo, tu bebé ya empieza a crecer dentro de tu vientre. En esta semana, después de haber sido concebido, el óvulo fecundado comenzará su proceso de división celular. Después de transcurridas las 30 horas de la fecundación, empezará dividiéndose en 2 células, luego en 4, posteriormente en 8, y así sucesivamente, mientras se dirige a las trompas de Falopio para instalarse en el útero. Al llegar ahí, ya tendrá el aspecto de una pequeña pelota, llamada mórula².
La mórula se ahuecará, y posteriormente, se llenará de líquido. A partir de ahí se le conoce como blástula, que al final de la tercera semana empezará a adherirse a las paredes del útero, conocidas como endometrio. A este proceso se le llama implantación, y es un paso fundamental durante el embarazo, puesto que el embrión recibirá los nutrientes y eliminará los desechos por esta vía. Al pasar las semanas, esta zona donde se ha implantado el embrión evolucionará para formar la placenta².

En cuanto se produce la concepción, los niveles hormonales en tu cuerpo comienzan a cambiar. Desde este momento, comenzarás a producir menos progesterona, lo cual inhibirá tu periodo menstrual; asimismo, los niveles de gonadotropina en tu organismo (la hormona que detectan las pruebas de embarazo) aumentan¹.

Al planear tu embarazo o durante los primeros momentos de él, debes considerar realizarte un check up preventivo para identificar condiciones que podrían impactar durante esta etapa. Detectar estos factores ahora es muy importante, puesto que las primeras 8 semanas tu bebé desarrollará sus órganos vitales³. En este check up preventivo, tu ginecólogo/obstetra podría hacerte algunas preguntas sobre:

• Tu estilo de vida y alimentación cotidiana^3.
• Tu historial médico y el de tu familia³.
• Los medicamentos que tomas³.
• Posibles embarazos previos³.
• Tu historial de vacunación³.

Además de esto, puedes comenzar a hacer algunos ajustes en tu estilo de vida para cuidar tu salud y la de tu bebé durante el embarazo⁴. Estos incluyen:

• Deja de fumar: Fumar en el embarazo está relacionado con una gran variedad de riesgos de salud, como un nacimiento prematuro, bajo peso al nacer, síndrome de muerte súbita del lactante, entre otros. Ten en mente que el ser fumadora pasiva también puede afectar la salud de tu bebé, así que vale la pena pedirle a quienes te rodean que eviten fumar cerca de ti⁴.
• Evita la ingesta de alcohol: El alcohol puede pasar a tu bebé durante el embarazo y causarle daños a largo plazo en su salud⁴.
• Mantén peso saludable: Tener sobrepeso (IMC superior a 25) u obesidad (IMC superior a 30) podría aumentar el riesgo de desarrollar algunos problemas en el embarazo, como presión arterial alta, diabetes gestacional o trombosis venosa profunda. Consulta a tu médico para que te ayude a determinar cuál es el peso ideal para ti, y trata de llevar una dieta saludable y hacer ejercicio moderado⁴.
• Visita a tu dentista: Las hormonas del embarazo y las náuseas podrían aumentar el riesgo de tener problemas dentales. Te recomendamos acudir con tu dentista para prevenir y corregir cualquier problema existente, así como determinar cuál es la mejor forma para mantener tus dientes y encías saludables durante el embarazo⁵.
• Cuida tu salud mental: Contar con el apoyo de las personas que quieres y en las que confías es de gran importancia durante el embarazo. Si has tenido alguna condición concerniente a tu salud mental en el pasado o estás tomando medicamentos, no dudes en hablar con tu médico sobre este tema. Sólo él podrá darte la recomendación adecuada con base en tu historial clínico⁵.
• Acude a tu médico de forma oportuna: En cuanto sepas que estás embarazada o creas que podrías estarlo, agenda una consulta con tu médico, quien te ayudará a planear tu embarazo de forma adecuada⁵.

Aquí te contamos algunas de las formas que te ayudarán a saber si estás embarazada.

Ahora que estás embarazada, es importante que te prepares con una nutrición adecuada para los siguientes meses que vendrán. Aquí te contamos sobre tres nutrientes importantes durante el embarazo.

• Ácido fólico: El ácido fólico o folato es muy importante para las mujeres embarazadas, así como para las que están tratando de concebir. Algunos estudios han demostrado que consumir al menos 0.4 miligramos de ácido fólico al día (antes y durante el embarazo) puede ayudar a prevenir defectos del tubo neural en tu bebé, que impiden el desarrollo total del cerebro y la médula espinal. Estos defectos congénitos suelen aparecer en los primeros 28 días del embarazo, cuando muchas mujeres aún no saben que están embarazadas 6. Puedes encontrar el ácido fólico en vegetales de color verde oscuro (como el brócoli y las espinacas), algunas legumbres como los frijoles y en algunos cereales enriquecidos. Sin embargo, es probable que tu médico te sugiera algún suplemento que te ayude a llegar a los niveles recomendados de ácido fólico al día 6.
• Hierro: Mientras estés embarazada, necesitarás consumir al menos 27 miligramos de hierro al día7. Tu cuerpo usará este mineral para producir suficiente hemoglobina (la proteína que transporta oxígeno por el cuerpo) para ti y tu bebé durante esta etapa. Consumir las cantidades adecuadas de hierro puede ayudarte a prevenir la anemia durante el embarazo8. Algunos alimentos ricos en hierro son las verduras de hoja verde oscuro, los frijoles, los chícharos y algunas carnes de origen animal, como las rojas, la carne de aves y el pescado7.
• DHA: El DHA juega un papel importante en esta etapa. Este componente se integra en los tejidos de la retina y el cerebro, y ocupa un papel importante en el neurodesarrollo fetal. Ingerir 200 mg de DHA al día puede ayudar a reducir el riesgo de parto prematuro, depresión posparto, entre otras9.

¡Sigue cuidando tu salud en cada etapa! Consulta aquí más información y tips útiles para la semana 4 de embarazo.

¿Te sirvió este artículo? Suscríbete gratis a Club EnfaBebé y accede a más contenido útil para cuidar de tu salud y la de tu bebé durante cada etapa de su desarrollo.

RKT-M-08145