1.- Si mi embarazo es de alto riesgo, ¿puedo mantener relaciones sexuales?
Hay que tener en cuenta que ciertas condiciones en las que es preferible mantener la abstinencia, según lo indique el médico. La primera es si tuviste amenaza de aborto o algún tipo de sangrado durante el primer trimestre. Las alteraciones en la placenta (mala implantación, o lo comúnmente llamado como placenta previa), antecedentes de partos pretérmino o de cerclaje también son condiciones en las que se debe tener cuidado con la vida sexual durante él embrazo. No olvides que solo tu médico de cabecera puede dar una recomendación certera de acuerdo con tu historia clínica.
2.- ¿Es peligroso mantener relaciones sexuales si siento que se mueve mucho mi bebé?
No, esto no es riesgoso ni puede repercutir en el bebé, pues el líquido amniótico actúa como amortiguador para protegerlo. Incluso, sentir que se mueve puede dejarte más tranquila, pues lo normal a partir de la semana 20 es que permanezca en movimiento constante durante el día.
3.- ¿Es seguro usar lubricante durante las relaciones en el embarazo?
Sí, es seguro. Incluso, si existe falta de lubricación o dolor relacionado con esta, el lubricante puede ayudarnos mucho en este tema. Recuerda siempre adquirir uno con base de agua, y preferentemente que no tengan sabor ni olor. Si contribuye a mejorar la vida sexual, puede usarse las veces que tú lo necesites, pues no implica un riesgo para el bebé ni para ti.
4.- ¿Cuánto tiempo debo esperar después de dar a luz para tener relaciones sexuales con mi pareja?
En cuanto tú te sientas cómoda es el momento preciso para reiniciar la vida sexual después del embarazo. En general, la mayoría de las mujeres se siente lista en 3 a 4 semanas después del nacimiento del bebé, pero esto no es determinante: puede suceder antes o después de este lapso. Lo importante es que no haya dolor de por medio y resulte un momento placentero para ambos.
5.- ¿Es riesgoso tener relaciones sexuales de forma muy constante durante el embarazo?
No: mientras exista el deseo sexual, puedes practicarlas tanto como lo desees. No existe ninguna contraindicación ni frecuencia estimada para lograrlo; mientras sea consensuado y resulte cómodo para ambos, es perfectamente seguro.