¡Hola! Sabemos que tienes muchas dudas sobre la alimentación de tu bebé prematuro. Por eso recabamos esta información, para ayudarte a estar más informada y tranquila.
Primero debes recordar que la inmadurez de los reflejos de succión y deglución podrían impedir que tu pequeño pueda comer por la boca.1
Así que la alimentación que le darán a tu hijo en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) puede iniciar vía intravenosa o a través de un tubo o sonda dirigido a su estómago. Es para su salud, no debes sentirte preocupada; es importante para darle todos los nutrientes que necesita.1
Al principio lo que recibirá es solo una estimulación por vía digestiva. Y si en lo sucesivo no se puede continuar, tendrá que recibir alimentación por la vena. Es lo que se llama “nutrición parenteral total (NPT)”.1
También se podrá comenzar su alimentación a través de un tubo o sonda que es introducido por su boca o nariz, llegando directamente al estómago. A esto se le llama “alimentación por sonda”.1
Tanto la vía intravenosa como la alimentación por sonda se consideran métodos estándar de alimentación. La breve molestia que causa su colocación es compensada por los beneficios que estos métodos proporcionan al bebé.1
Conforme vaya creciendo tu bebé se irán desarrollando sus reflejos naturales de succión y deglución, siendo capaz de alimentarse mediante la lactancia materna o, en caso de ser necesario, a través de alguna alternativa adecuada para su alimentación, de acuerdo a lo que sea indicado por el médico.1
Además, es importante que tu bebé reciba ácidos grasos, como el DHA*, a través de la vía de alimentación y nutrición que sea recomendada. El DHA* es fundamental para el desarrollo del cerebro y la visión; se encuentra en la leche materna y se acumula rápidamente en el último trimestre de embarazo2, por lo cual es importante que esté presente en la alimentación que recibe en la UCIN.1
Por ello, al ser tu bebé prematuro, se beneficia de recibir nutrientes como el DHA* para que continúe con su desarrollo y crecimiento.
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