El confinamiento y la pandemia de COVID-19 han traído cambios muy importantes para todos en la vida diaria. Estas modificaciones en nuestro día a día podrían tener impacto en la salud emocional 1.
No poder salir y/o tener que guardar ciertas precauciones crea para la mente la sensación de que la vida no es normal y, en efecto, por un tiempo ha tenido modificaciones. El confinamiento debido al COVID-19 puede ocasionar diversas emociones como miedo, ansiedad, preocupación e incluso cambios en las rutinas de alimentación y/o sueño 1.
Una manera de ayudar a disminuir esos efectos es mantener las rutinas cotidianas 2, pues estructuran nuestro día a día. Esto es tan importante para los adultos como para los niños.
Conservar las rutinas cotidianas es una estrategia de autocuidado que podemos aplicar durante la emergencia sanitaria que estamos viviendo para ayudarnos a conservar nuestra salud física y emocional1.
Crear o mantener una rutina nos ayuda a sentir que nuestra vida tiene estructura.
¡Cuídense mucho!
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1. Ministerio de Salud, Gobierno de Chile. Guía para el cuidado de la salud mental. Noviembre de 2019. Disponible en: https://www.minsal.cl/wp-content/uploads/2019/11/2019.11.20_Gu%C3%ADa-para-el-cuidado-de-la-salud-mental_versi%C3%B3n-digital.pdf [acceso 20 de abril, 2020].
2. UNICEF. 5 ways to help keep children learning during the COVID-19 pandemic. Disponible en: https://www.unicef.org/coronavirus/5-tips-help-keep-children-learning-during-covid-19-pandemic [acceso 19 de mayo, 2020].
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