¿Cómo preparar emocionalmente a tu hijo para una nueva etapa?

Se trate del inicio del año escolar, un hermanito nuevo o la cuarentena por COVID-19, las nuevas etapas pueden ser difíciles para los pequeños. Ayuda a tu hijo a transitar por los cambios de manera armoniosa.

La vida está llena de cambios y no siempre son fáciles de afrontar. Si para nosotros los adultos son complicados los cambios, para los niños lo son mucho más¹, sobre todo si implica tratar con personas nuevas o dejar de ver a gente querida. Los trastornos emocionales en niños pueden tener diferentes causas.

Sea que tu pequeño esté a punto de entrar a un nuevo grado escolar, que planees un cambio de casa o esté en camino un nuevo hermanito, estos consejos generales te serán de mucha ayuda para apoyar el óptimo desarrollo emocional de un niño ante una nueva etapa.

1. Infórmale con suficiente antelación. No esperes a que él se dé cuenta por sí mismo de que algo está pasando. Sentir que algo pasa y no saber qué es provoca en los niños inseguridad y angustia.^1,2 Organiza con él una plática pensada para platicarle lo que sucede o sucederá.

2. Usa un lenguaje directo, sencillo y natural. Comunícale lo más básico. Sin embargo, no ocultes información que él deba conocer.¹

3. Válida y respeta absolutamente sus reacciones ante las noticias. Si llora o se entristece, no lo califiques de exagerado. Escucha con respeto lo que él siente al respecto, sea lo que sea y dale una amorosa contención.²

4. Si notas que tiene sentimientos intensos respecto al cambio, pero no los expresa verbalmente, procura tener con él una o varias conversaciones para que le “ponga nombre” a lo que siente.²

5. Ofrécele alternativas para que se sienta mejor. Si le angustia su nuevo periodo escolar, por ejemplo, organiza una llamada con su futura maestra, para que tenga un acercamiento previo. O busca en internet la página web de su escuela, para que se vaya familiarizando con ella. Si se trata de un nuevo hermanito, platícale cómo fue tu embarazo de él mismo y cómo lo esperaste con mucha ilusión. Se trata de dar a tu hijo acompañamiento durante este proceso y lograr que te sienta muy cerca.²

6. Si el cambio implica un proceso largo, por ejemplo, una mudanza, cuéntale las diferentes etapas que vivirán. Destaca las partes buenas que traerá la nueva etapa y no trates de ocultar las partes “malas” (como dejar de ver a amigos queridos).¹ Déjalo expresarse libremente.

7. Conserva la mayor cantidad de rutinas que se puedan, ya que eso le dará una sensación de normalidad.^1,2 Por ejemplo, aunque vivan en otra casa, puedes procurar que su habitación tenga todos sus objetos favoritos o seguir cocinando su comida predilecta. Así notará que hay muchas cosas queridas que no han cambiado y se sentirá más seguro.

Aplicar estos consejos no solo ayudará a tu pequeño a sobrellevar los cambios sintiéndose más seguro. Con el tiempo, también le ayudarán a desarrollar una cualidad muy importante: la resiliencia o capacidad de adaptación¹. Recuerda que consultar a un profesional puede ayudar a evitar problemas emocionales en los niños.

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